Omar Ramírez Tejeda

República Dominicana participó en el VIII Foro Latinoamericano y Caribeño del Carbono, organizado por el Programa de las Naciones Unidas para el Medio Ambiente PNUMA), el Banco Mundial, el Banco Interamericano de Desarrollo y el Programa de las Naciones Unidas para el Desarrollo, realizado en Bogotá, Colombia.

En la organización del evento, además participaron, la Organización Latinoamericana para la Energía, la Organización Internacional de Comercio de Emisiones y el Ministerio de Medio Ambiente y Desarrollo Sostenible en representación del Gobierno Nacional, quienes actuaron también como anfitriones del evento.

Omar Ramírez Tejada, vicepresidente ejecutivo del Consejo Nacional para el Cambio Climático y el Mecanismo de Desarrollo Limpio, actuó como moderador de un panel sobre el “Futuro Acuerdo Climático Global: Rol de la región de América Latina y el Caribe en la contribución a los esfuerzos globales”.

Ramírez introdujo el panel destacando que la región Latinoamericana y Caribeña (LAC) incluye cinco de los 10 países más vulnerables del planeta, seis de los 17 países mega-diversos del mundo y que su huella de carbono apenas alcanza 11% de la matriz de las emisiones  globales.

Agregó que se estima que la transición a un modelo de desarrollo bajo en carbono en la región de LAC va necesitar entre US$40 a US$80 mil millones por año: “Aprovechando estos recursos se necesita un gran esfuerzo de los sectores público y privado en el uso innovador y el desarrollo de instrumentos y mecanismos financieros”.

El panel estuvo compuesto por John Kilani director del Secretariado de la Convención; John Christensen, director del PNUMA-DTU;Álvaro Umaña, exministro de Ambiente de Costa Rica; Eduardo Sanhueza, asesor de Cambio Climático del Ministerio de Relaciones Exteriores de Chile; Carl Bernadac, director para la región Andina de la Agencia Francesa para el Desarrollo, y Santiago Briceño, del Ministerio de Relaciones Exteriores de Colombia.

Los participantes presentaron los avances que ha tenido la Convención y los elementos claves  en el diseño del acuerdo post 2020 y el rol de la próxima Conferencia de las Partes en Lima para hacer progresos sustantivos en la finalización de un acuerdo en 2015. Además los panelistas discutieron cómo los países de América Latina y el Caribe podrían contribuir en la generación de un impulso durante este año crítico en el proceso de negociación climática.

Al ofrecer por separado sus conclusiones los presentadores coincidieron en la necesidad de contar con“Estrategias Nacionales de Desarrolloque tengan entre sus objetivosfomentar la descarbonización de las economías nacionales a través del uso de fuentes renovables de energía, desarrollo del mercado de biocombustibles, mejora del ahorro y eficiencia energética y un transporte eficiente y limpio.

Además presentaron las políticas y la Leyes de eficiencia energética, que buscan armonizar las necesidades de desarrollo económico, de seguridad energética y protección ambiental y climática yque implementarán políticas de planificación integrada entre los diversos sectores de la economía nacional y creará conciencia de la necesidad de trabajar en conjunto hacia una misma meta que involucre el desarrollo nacional dentro del marco de la reducción de emisiones y la protección del medio ambiente.

En la plenaria también se discutieron los retos globales financieros de ALC para pasar a un modelo de desarrollo bajo en carbono y un crecimiento verde más inclusivo y de las oportunidades, las condiciones y las mejores prácticas en el aprovechamiento de la financiación y la planificación de desarrollo bajo en carbono.

El encuentro convocó a representantes y expertos de 21 países latinoamericanos y caribeños y de las agencias bilaterales y multilaterales de cooperación internacional, ONG, representantes de las academias y público en general.