FREETOWN, Sierra Leona. Las cuadrillas de enterramiento de Sierra Leona volvieron a trabajar un día después de haber organizado una huelga por cuestiones de salario y haber abandonado los cadáveres de las víctimas de ébola en la capital.
En la vecina Liberia, sin embargo, los trabajadores del sector salud dijeron el miércoles que planeaban hacer un paro de labores si sus demandas por un aumento salarial y equipo de seguridad no eran cumplidas para el fin de semana.
Las muestras de frustración de los asediados trabajadores de salud en África Occidental se dan en momentos en que las autoridades españolas investigan si una auxiliar de enfermería infectada con ébola se contagió del mortal padecimiento al tocarse el rostro con guantes contaminados. El caso de Teresa Romero es el primer incidente registrado de alguien que contrae la enfermedad fuera de la zona del brote en África Occidental.
La Sierra Leone Broadcasting Corporation reportó esta semana que los cadáveres de las víctimas de ébola fueron abandonados en viviendas y en las calles de Freetown debido a la huelga de los equipos de enterradores. Tales cuerpos son altamente contagiosos.
Pero en una entrevista por radio el miércoles por la mañana, el viceministro de salud de Sierra Leona, Madina Rahman, dijo que la huelga estaba “resuelta”. Más tarde durante el día, pudo verse a uno de los equipos sacando cadáveres de un hospital público para su entierro en el oeste de Freetown. El líder del grupo se negó a ser entrevistado pero dijo que se les prometió una compensación económica por actividades de riesgo para el final del día.
Rahman dijo que la disputa se centró en el atraso de una semana a la compensación por trabajos peligrosos, que ya se depositó en los bancos pero no se había entregado a tiempo a los enterradores.
“El ministerio de salud va a investigar la demora en el pago del salario de los trabajadores del sector salud”, aseguró Rahman.
En Liberia, los trabajadores sanitarios exigen salarios mensuales de 700 dólares y equipo de protección personal, dijo George Williams, secretario general de la Asociación Nacional de Trabajadores Sanitarios.
“Damos al gobierno hasta el fin de semana para que atienda todo esto o de otra forma dejaremos de trabajar”, dijo Williams.
El salario promedio para los trabajadores del sector salud es actualmente inferior a los 500 dólares por mes incluso para el personal más capacitado. El ministro de Finanzas, Amara Konneh, defendió la compensación para estos trabajadores cuando dijo la semana pasada que era más que lo que Sierra Leona y Guinea estaban ofreciendo.
Los trabajadores sanitarios son especialmente vulnerables al ébola, que se contagia al entrar en contacto con los líquidos corporales de personas enfermas.
La misión de las Naciones Unidas en Liberia informó el miércoles que un miembro de un equipo médico internacional contrajo la enfermedad, el segundo integrante de la misión que se contagia. El primero murió el 25 de septiembre.