SANTIAGO. Con una misa de cuerpo presente, a la cual asistieron el nuncio apostólico, unos 10 obispos y delegaciones de sacerdotes de casi todas las parroquias del país y en medio de peticiones de que sea canonizado fueron sepultados la tarde de este martes en la Cripta de los Obispos de la Catedral Santiago Apóstol los restos del arzobispo emérito Juan Antonio Flores Santana, fallecido del pasado domingo.
La misa fue oficiada por monseñor Ramón Benito de la Rosa y Carpio, arzobispo de la Arquidiócesis de Santiago, mientras que el cardenal Nicolás de Jesús López Rodríguez leyó la homilía, en la cual resaltó las virtudes y la buena labor sacerdotal de Monseñor Flores Santana.
Además, de la participación de varios de los obispos que integran la Conferencia del Episcopado Dominicano, asistieron los sacerdotes y diáconos ordenados por monseñor Flores Santana.
También monseñor de la Rosa y Carpio destacó la fecunda labor pastoral de Flores Santana.
Durante la eucaristía oficiada por monseñor Agripino Núñez Collado, el ex presidente Hipólito Mejía calificó a monseñor Flores Santana como un hombre excepcional.
De su lado, la Primera Dama, Cándida Montilla de Medina, quien se definió como una discípula de monseñor Flores Santana, dijo que se debía dar gracias a Dios por su permanencia.
Montilla de Medina recordó que trabajó junto al sacerdote en la escuela de evangelización Emiliano Tardif.
Al destacar el ejemplo que deja, llamó a no llorar la partida, sino a vivir en su ejemplo.
Durante la homilía, monseñor Agripino Núñez Collado destacó la labor pastoral desempeñada por Flores Santana de 87 años de edad quien falleció el pasado domingo.
En horas la tarde asistieron personalidades de la sociedad dominicana, empresarios, comerciantes, funcionarios gubernamentales y municipales, así como cientos de feligreses.
En el acto religioso, Mercedes Flores, sobrina del arzobispo emérito de Santiago, habló a nombre de la familia, mientras que el padre Wilson Arias leyó el testamento dejado por monseñor Flores Santana y el decreto del Arzobispado de Santiago sobre el novenario del extinto prelado católico.