Andres-NavarroSANTO DOMINGO, República Dominicana. El ministro de Relaciones Exteriores anunció que a partir del próximo mes de enero la Cancillería comenzará la reforma en el servicio diplomático del país, que impactará al personal consular y de las embajadas de República Dominicana en todo el mundo.

Andrés Navarro dijo que mediante la ejecución de ese plan es seguro que se producirán reducciones en las embajadas y consulados que tengan un personal que no lo necesiten.

Navarro agregó que es muy probable que otras legaciones que revistan capital importancia para el país se le refuercen con funcionarios y diplomáticos con capacidad para realizar un trabajo agresivo en la promoción de la República Dominicana como destino de inversión de capitales.

Entrevistado por Héctor Herrera Cabral en el programa D´AGENDA que cada domingo se difunde por Telesistema Dominicano, el canciller dijo que para el presidente Danilo Medina la eficientización del servicio exterior es un eje fundamental de su administración.

Sostuvo que ya el plan está prácticamente listo y espera ponerlo en ejecución en las primeras semanas del mes que viene, de un año que será histórico para la diplomacia dominicana.

Como caso concreto de esos trabajos anunció que próximamente la Cancillería abrirá dos oficinas en la frontera, una en Jimaní y la otra en Dajabón tomando en cuenta la importancia que tiene Haití para el país.

Como otro ejemplo de la dinamización de los trabajos del servicio exterior dominicano, Navarro reveló que en el 2016 visitarán al país más de diez mil funcionarios de América Latina, el Caribe y otro parte del mundo.

El ministro de Relaciones Exteriores dijo que hasta el momento la Cancillería no ha recibido ninguna denuncia por parte de embajadores acreditados en el país por mala práctica de funcionarios dominicanos en contra de inversionistas extranjeros.

Sin embargo,  dijo que lo que sí ha recibido son quejas en torno a otorgamiento de permisos o en situación de disputas en lo concerniente al régimen de propiedad.

Explicó que atendiendo a esas preocupaciones la Cancillería ha dispuesto la apertura de una mesa de diálogo con el sector empresarial, principalmente con inversionistas extranjeros quienes a través de sus embajadas canalizan esas inquietudes las cuales son llevadas hasta los funcionarios competentes para que le busquen soluciones.